Modificación de conducta para el cambio de hábitos alimentarios y patrones de actividad física en obesidad infantil.
Decidimos como equipo elegir este tema, ya que estamos conscientes del papel que juega la obesidad en la salud mundial en la actualidad, sin embargo esto continuará siendo estadísticamente parte del problema de salud mundial en el futuro si no hacemos cambios drásticos en los hábitos de nuestros niños.
Después de leer el recurso básico para el tema, así como investigar de diversas fuentes, referencias y documentales podemos afirmar que la obesidad infantil se trata de un problema complejo que como menciona Saldaña se origina fundamentalmente por un balance energético positivo entre la ingesta calórica y el consumo energético, afirmando así que los niños con este problema de salud están comiendo más de lo que están quemando caloricamente; esto debido al tipo de hábitos actuales que se manejan en diversas sociedades a nivel mundial, viendo un poco hacia atrás en la historia podemos ver que los niños del siglo pasado podían salir a jugar a las calles, quemando así calorías y haciendo que este problema no fuera tan severo, sin embargo en la actualidad el estilo de vida sedentario en la infancia presentado por diversos factores tales como inseguridad, falta de espacio y hábitos como el estar sentados mirando solo televisión o por las diversas tecnologías ha provocado que este problema vaya en aumento, aunado a los hábitos alimenticios reforzados por la publicidad de la enorme industria alimenticia, pero ese tema lo tocaremos más adelante, vamos primero a explicar paso a paso la delimitación del problema tomando en cuenta su definición, etiología, epidemiología, clasificación, tipos de evaluación, estrategias y programas de intervención con un enfoque de la psicología de la salud.
DELIMITACIÓN.
"La obesidad se caracteriza por ser una acumulación excesiva de grasa corporal innecesaria" Saldaña, C. (1998) p.2 así podemos definir que la obesidad infantil es una acumulación de grasa corporal que se inicia en la infancia del sujeto y abarca hasta el final de la adolescencia, pero también es importante mencionar que el sobrepeso también forma gran parte del problema, definiéndolo como un exceso de peso en relación a la complexión, talla y edad del sujeto.
Esto se convierte en un problema de salud llevando consigo múltiples problemas tanto de salud como psicosociales, los cuales abarcan gran parte de nuestro campo, estos problemas van desde la pérdida de autoestima por el rechazo y discriminación que se viven por esta condición, hasta casos graves como suicidio.
Esto se convierte en un problema de salud llevando consigo múltiples problemas tanto de salud como psicosociales, los cuales abarcan gran parte de nuestro campo, estos problemas van desde la pérdida de autoestima por el rechazo y discriminación que se viven por esta condición, hasta casos graves como suicidio.
Como menciona Saldaña los estudios demuestran que los niños obesos corren un alto riesgo de convertirse en adultos obesos, generando así un problema de salud actual y futuro, en el que la psicología de la salud puede intervenir drásticamente para cambiar estas estadísticas tanto presentes como para la población del futuro.
FACTORES QUE PROMUEVEN LA OBESIDAD EN LOS NIÑOS.
Podemos comparar a diferencia del siglo pasado que las tazas de obesidad infantil van en aumento en la actualidad, pero esto también lleva una gran carga psicológica de por medio, ya que la publicidad y mercadotecnia nos pueden atrapar en un círculo vicioso, podemos ver por ejemplo que las grandes cadenas de comida chatarra utilizan factores de satisfacción psicológica como agregar dibujos animados, juguetes, juegos en sus restaurantes y un sin fin de elementos que hacen que los niños se sientan bien al consumir sus productos, al ir al súper podemos ver que en las cajas de cobro al estar haciendo filas ponen los dulces y productos chatarra al alcance de los niños para que pidan que sus padres les compren en la espera de concluir las compras, los comerciales de productos con exceso de azúcar están presentes y más aún en los programas infantiles, haciendo uso de los personajes favoritos de los niños para que deseen consumir los mismos, pero no solo en factores externos de casa, sino también cuando los padres recompensan a los niños con golosinas, creando así un reforzador no solo físico con el azúcar, sino emocionalmente... es ahí donde el psicólogo de la salud puede intervenir no solo creando hábitos saludables como el ejercicio o la buena alimentación, sino también orientando y haciendo ver a los niños y a los padres el problema que conlleva esta situación. Estos programas de intervención tendrán dos objetivos básicos:
- Producir una reducción significativa del peso del sujeto
- Enseñar y promover hábitos alimentarios y patrones de actividad física
Como psicólogos de la salud debemos tomar en cuenta el ámbito en el que desarrolla el niño, su edad, capacidades y me parece que al considerar la edad del niño muchos de estos programas deben ser dirigidos a los padres, ya que en la mayoría de los casos, sobre todo de niños pequeños el padre es el que inculca, guía y enseña estos hábitos, también el padre es el responsable de lo que compra o permite que consuma el niño así como las cantidades, sin que así se descuide el consumo y equilibrio calórico y nutricional. ya que al encontrarse en una etapa de desarrollo puede verse afectado el desarrollo.
Podemos asegurar que uno de los programas de mayor éxito en la intervención es el inculcar hábitos de actividad física, ya que esta facilita la pérdida calórica y por lo tanto ayuda a reducir y mantener un peso saludable en la población infantil.
Estrategias para la modificación de hábitos
Podemos generar cambios conductuales a través de distintos programas, tales como ... "reforzamiento positivo, costo de respuesta, control de estímulos, modificación del estilo de comer, el cambio de actitud" Saldaña, C. (1998) p.4 así como distintas estrategias para generar la conducta deseada que en este caso serían hábitos de actividad física y alimentación saludable, que según el autor van desde las dos semanas hasta un año o hasta conseguir el peso deseado; por otra parte este tipo de programas pueden extenderse a una alimentación saludable en la escuela, involucrando tanto a los padres como al ambiente en que el niño se desarrolla, con técnicas tales como evitar la venta de chatarra, bebidas azucaradas y alimentos poco saludables, así como promoviendo la actividad física.
Se nos presentaron una serie de pasos o instrumentos para la aplicación de programas, en los cuales cabe destacar que la evaluación de la intervención es punto clave para saber si los programas que se están aplicando están siendo de utilidad, así como es importante también dar el seguimiento adecuado para el éxito del programa.
REFERENCIAS
- Producir una reducción significativa del peso del sujeto
- Enseñar y promover hábitos alimentarios y patrones de actividad física
Como psicólogos de la salud debemos tomar en cuenta el ámbito en el que desarrolla el niño, su edad, capacidades y me parece que al considerar la edad del niño muchos de estos programas deben ser dirigidos a los padres, ya que en la mayoría de los casos, sobre todo de niños pequeños el padre es el que inculca, guía y enseña estos hábitos, también el padre es el responsable de lo que compra o permite que consuma el niño así como las cantidades, sin que así se descuide el consumo y equilibrio calórico y nutricional. ya que al encontrarse en una etapa de desarrollo puede verse afectado el desarrollo.
Podemos asegurar que uno de los programas de mayor éxito en la intervención es el inculcar hábitos de actividad física, ya que esta facilita la pérdida calórica y por lo tanto ayuda a reducir y mantener un peso saludable en la población infantil.
Estrategias para la modificación de hábitos
Podemos generar cambios conductuales a través de distintos programas, tales como ... "reforzamiento positivo, costo de respuesta, control de estímulos, modificación del estilo de comer, el cambio de actitud" Saldaña, C. (1998) p.4 así como distintas estrategias para generar la conducta deseada que en este caso serían hábitos de actividad física y alimentación saludable, que según el autor van desde las dos semanas hasta un año o hasta conseguir el peso deseado; por otra parte este tipo de programas pueden extenderse a una alimentación saludable en la escuela, involucrando tanto a los padres como al ambiente en que el niño se desarrolla, con técnicas tales como evitar la venta de chatarra, bebidas azucaradas y alimentos poco saludables, así como promoviendo la actividad física.
Se nos presentaron una serie de pasos o instrumentos para la aplicación de programas, en los cuales cabe destacar que la evaluación de la intervención es punto clave para saber si los programas que se están aplicando están siendo de utilidad, así como es importante también dar el seguimiento adecuado para el éxito del programa.
REFERENCIAS
González. B., Merino. M. (1996) Nutrición saludable y Prevención de los Trastornos Alimentarios. Madrid pp. 122
Saldaña, C. (1998), Modificación de conducta para el cambio de hábitos alimentarios y patrones de actividad física en obesidad infantil. En F. X. Méndez y D. Maciá A. (Comps.). Modificación de conducta con Niños y Adolescentes. Madrid: Ediciones Pirámide
Socorro. R, Riebeling. G, Psicolgía de la obesidad. Esferas de vida. Multidisciplina y complejidad. 2a edición. México. Manual moderno 2014
Taller de elaboración y recopilación de materiales para escuelas de madres y padres. Curso 2007- . 2008 España. Recuperado de: https://www.naos.aesan.msc.es/estrategia/que_es/
UNICEF México, Salud y nutrición. La buena nutrición es la base del crecimiento y desarrollo de niños, niñas y adolescentes ya que previene enfermedades y favorece un mejor estado de salud. Consultado el:10 de noviembre de 2019. En:https://www.unicef.org/mexico/salud-y- nutrici%C3%B3n
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