Obesidad infantil ¿Premias a tus hijos con alimentos?

De acuerdo a los datos de la Organización Mundial de la Salud(OMS) nuestro país ha ocupado el primer lugar en obesidad infantil a nivel mundial por lo que es necesario que se destinen recursos para disminuir y, a largo plazo, eliminar esta enfermedad que se está convirtiendo en una pandemia.

La obesidad es un estado corporal en el que el cuerpo tiene una cantidad de grasa en exceso provocando malestar físico y emocional que debe ser tratado de manera integral; por médicos, nutriólogos y psicólogos.

Desde el punto de vista médico, la obesidad infantil es la causa número uno de la diabetes; enfermedad que cambia la vida radicalmente de los niños y que potencialmente pone en peligro su vida por lo que es uno de los principales problemas de la salud pública. 

Desde el punto de vista psicológico lo que nos interesa es la afectación emocional que tienen los niños al ser señalados por ser obesos o tener sobrepeso. Desde que los niños están en edad escolar es común que sean discriminados al momento de formar equipos o que sean el objeto de burla de compañeros; lo que al inicio de su vida era una característica de belleza y ternura, se torna en un problema de salud de la persona.

Las personas desde niños aprenden a asociar la comida con el placer, desde que los padres premian a sus hijos con dulces por haber logrado alguna pequeña meta o por cumplir con las reglas. Así desde pequeños las personas van seleccionando los alimentos que les gustan por el sabor, pero también que les causa placer; se utiliza la comida para sentirse aceptado e integrado.

Considerando lo anterior, será más probable que los niños tiendan a consumir alimentos ricos en azúcar cada que sientan la necesidad de aprobación por parte de quienes lo rodean ya que relacionarán la aceptación del padre o de la madre con los dulces que se les daban como premio cada que hacían algo bien.

Lo anterior nos deja claro que para acabar con el problema de la obesidad infantil será necesario cambiar los hábitos de vida de toda la familia. Si no se realiza ningún cambio en el entorno del niño tendrá mayores posibilidades de ser obeso cuando sea adulto.

El estilo de vida de quienes rodean al niño obeso tendrán un gran impacto en el mantenimiento o desaparición de la condición obesa.

Los objetivos del cambio en estilo de vida deben de ser: primero, disminuir el porcentaje de obesidad y segundo, tener nuevos y buenos hábitos alimenticios para prevenir la aparición de enfermedades como consecuencia de la obesidad infantil.

Referencias

García, K. (2018). Tratamiento de la obesidad infantil desde la Psicología. Hacia una real modificación de actitudes. Investigaciones MedicoquirúRgicas, 10(1). Recuperado de http://www.revcimeq.sld.cu/index.php/imq/article/view/413/484

Martinez, C. & Navarro, G. (2014). Factores psicológicos, sociales y culturales del sobrepeso y la obesidad infantil y juvenil en México. Revista Médica del Instituto Mexicano del Seguro Social, 52(1), 94-101. Recuperado de: http://revistamedica.imss.gob.mx/editorial/index.php/revista_medica/article/view/807

Saldaña, C. (1998), Modificación de conducta para el cambio de hábitos alimentarios y patrones de actividad física en obesidad infantil. En F. X. Méndez y D. Maciá A. (Comps.). Modificación de conducta con Niños y Adolescentes. Madrid: Ediciones Pirámide